LA IMPORTANCIA DEL CUÁDRICEPS EN DIFERENTES
DISCIPLINAS: CARRERA DE MONTAÑA
El
cuadriceps es uno de los músculos más importante de la pierna; consta de tres
músculos vastos (vasto medial, vasto intermedio y vasto lateral) y del músculo
recto femoral. Su función es extender la pierna y la articulación de la
rodilla, pero el componente del recto femoral ayuda en la flexión del muslo en
la articulación de la cadera. Debido a que los músculos de los vastos se
insertan en los bordes de la rótula y también el tendón del cuádriceps femoral,
estabilizan la posición de la rótula durante el movimiento de la rodilla. Por
todo lo expuesto podemos decir que el cuádriceps es uno de los pilares del
corredor de montaña; por lo que su estado es clave a la hora de afrontar con
éxito una carrera dada su implicación.
Muchos
son los músculos implicados en la actividad que supone correr por montaña, pero
pocos son de tal importancia como lo es este músculo: es uno de los más
exigidos a la hora de enfrentarse a los desniveles y a los terrenos técnicos
que prácticamente toda carrera de montaña suele tener con independecia de su
longitud.
Por
ello, los cuádriceps son considerados como uno de los grandes pilares que
soporta toda estructura del corredor de montaña y siempre deben tenerse en
cuenta en el plan de entrenamiento previo a las carreras, en el que se debe
incluir un plan de fortalecimiento muscular aplicado a esta disciplina, la
trail running.
Cuando
corremos por montaña, los cuádriceps siempre están realizando un esfuerzo intenso
y, de ahí, que sea uno de los primeros músculos que caerán en la fatiga. Lo más
común es que se suela mostrar signos de agotamiento en los descensos, ya que
son unos de los principales encargados de frenar nuestro cuerpo.
Por
ello, se hace necesario su fortalecimiento si queremos mejorar nuestro
rendimiento, tanto entrenando como en competiciones. Unos cuádriceps fuertes
harán que seamos mejores corredores.
La
forma más común que se sigue para fortalecer este músculo es utilizar las
máquinas de guimnasio, ya que trabajan estos músculos de forma muy localizada
mediante el levantamiento de peso en extensión. Lo más positivo de estos
ejercicios, es que además de los cuádriceps se trabaja mucho el fortalecimiento
de rodilla, lo que repercutirá positivamente a la hora de prevenir posibles
lesiones en una de las articulaciones más exigidas en esto de correr por
montaña.
Pero
si no somos de esas personas que van al gimnasio, otra forma de trabajarlos son
las sentadillas; consisten en agacharnos sobre las rodillas, sin flexionar la
espalda, hasta un máximo de 90º para después volver a ponerse de pies. Lo más
importante a la hora de realizar este ejercicio es hacerlo con una buena
técnica, de forma que nunca doblemos las rodillas más allá de los 90º, además de
cuidar mucho la postura de la espalda para que éste no soporte el peso, con lo
que el cuádriceps no estarían trabajando como debieran y podríamos lesionarnos
la espalda.
Otra
opción muy buena para trabajar cuádriceps son las series en cuestas (arriba y
hacia abajo), lo más interesante es que estamos realizando el mismo movimiento
que hacemos corriendo y se fortalecerán de la forma más natural posible.
Otro
tipo de ejercicios que tenemos al alcance de la manop son los ejercicios de
pliometría, entre los que encontramos muchos que nos pueden ayudar a que
nuestros cuádriceps se hagan más fuertes.
Lo
más importante y, que se debe tener en cuenta, es que se haga siempre de forma
escalonada: empezar a fortalecerlos en pretemporada es lo más adecuado, así
conseguiremos una base muscular sólida sobre la que construir nuestro
entrenamiento.
No hay comentarios:
Publicar un comentario